«China lidera la producción y adopción de vehículos eléctricos en el mundo», según la consultora Ernst & Young.
Sin embargo, Estados Unidos prende sus alarmas y reconoce la importancia estratégica de este mercado emergente, impulsando fuertemente la adopción de vehículos eléctricos.
La legislación climática impulsada por el presidente Joe Biden ha fortalecido esta tendencia, respaldada por una inversión de 370 mil millones de dólares en subvenciones.
Esta Iniciativa no solo tiene un impacto significativo en Estados unidos, sino también en sus socios comerciales cercanos, como México, donde se están desarrollando nuevas cadenas de suministro para la producción de vehículos eléctricos generando oportunidades de crecimiento en la región.
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El avance de China en la industria de vehículos eléctricos
Aunque la creciente preocupación por reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en todo el mundo han impulsado la adopción de vehículos eléctricos.
Muchos gobiernos, como el de Estados Unidos, aún no logran estabilizarse en esta carrea de largo aliento.
Y los constantes cambios en sus políticas gubernamentales relacionadas con los vehículos eléctricos y la fuerte influencia de la industria del petrolero, generan incertidumbre y desaceleración en el avance de la producción y adopción masiva de estos vehículos.
Por otra parte, el gobierno chino, sigue implementando políticas ambiciosas de promoción de vehículos eléctricos, incluyendo subsidios generosos, exenciones fiscales y requisitos de cuotas de vehículos eléctricos desde mucho años antes de que el tema fuera relevante.
Recientemente China, en la búsqueda de mantener esta tendencia y reforzar la industria después de la pandemia decidió ampliar su programa de exenciones fiscales para los consumidores que compren vehículos eléctricos hasta 2027, por un valor estimado de 72.300 millones de dólares en los próximos 4 años.
Iniciativa que busca mantenerlos relevante y a la cabeza de esta revolución en la industria automotriz.
Sin olvidarnos también de que china tiene el mercado automotriz más grande del mundo, lo que crea una demanda interna considerable para los vehículos eléctricos.
Estados Unidos: Desafíos comerciales hacía el liderazgo de la electromovilidad
Estados Unidos se ha fijado un ambicioso objetivo para el futuro de la movilidad: que para el año 2030, la mitad de los autos vendidos en el país sean vehículos eléctricos.
Además, como parte de esta estrategia, ha establecido la exigencia de que el montaje de los vehículos eléctricos se realice en el país o en socios comerciales.
Sin embargo, estos objetivos no están exentos de desafíos.
Uno de los principales desafíos que enfrenta Estados Unidos es el suministro estable y suficiente de materias primas esenciales para la fabricación de baterías, en particular el litio.
El litio desempeña un papel crucial en la capacidad de almacenamiento de energía de las baterías de los vehículos eléctricos.
Y actualmente, China controla el mercado del litio con una participación del 79%, lo que plantea una limitación para la producción de vehículos eléctricos en Estados Unidos.
Recientemente, China y Rusia han anunciado una importante inversión de 1300 millones de euros en Bolivia para la explotación de litio.
Inversión que refuerza la posición dominante de China en la cadena de suministro del litio y resalta la necesidad de que Estados Unidos busque alternativas y soluciones para garantizar su propio suministro de litio en un escenario altamente competitivo.
Electromovilidad: ¡Una oportunidad para todos!
En esta emocionante industria del futuro, la logística y el transporte desempeñan un papel fundamental.
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